La vida marina

¿Por qué son estos fondos marinos tan extraordinarios? 

Porque, en una llanura sedimentaria (es decir, compuesta por un sustrato originado en materiales erosivos y/o transportados por ríos), se superpusieron los edificios volcánicos que mencioné anteriormente. Esto creó una multitud de refugios rocosos para muchos tipos de fauna. Además de este contraste entre un entorno sedimentario y uno volcánico, está el efecto barrera que estos edificios volcánicos presentan al cortar la corriente dominante en dirección NE-SO, lo que provoca que los sedimentos y nutrientes se acumulen en el lado expuesto a la corriente en comparación con el lado opuesto.

Caractericemos cómo son estos hábitats.

Ocupan dos «pisos» submarinos: el infralitoral (a profundidades entre 0 y 50 metros) y el circalitoral (entre 50 y 200 metros). Se definen dos tipos de sustrato: rocoso, con fondos rocosos y «coralígenos» dominados por invertebrados. El otro tipo de sustrato es detrítico, compuesto por restos orgánicos. Este sustrato tiene cuatro tipos de fondos: maërl (algas coralígenas), grava/conchas de moluscos, arenas fangosas y fondos con surgencias de gas. Como puedes ver, una mezcla muy rica de ecosistemas marinos.

Estos fondos marinos han atraído la atención de los especialistas debido a la ausencia de praderas de Posidonia oceanica, la planta marina que tradicionalmente domina el fondo marino mediterráneo. Los especialistas creen que esto se debe a la formación reciente de estos fondos marinos, para los cuales la Posidonia aún no habría tenido la oportunidad de colonizar.

Sustratos rocosos

 Estos fondos rocosos están dominados por un tipo zoológico llamado Cnidarios. Esta palabra te sonará a chino, pero no será tan extraña si te digo que los cnidarios son corales y medusas en general. Los cnidarios son animales que alternan, a lo largo de sus vidas, dos «etapas»: una etapa larval que navega libremente, y una etapa de pólipo, que se adhiere a una roca u otros pólipos, desarrolla tentáculos alrededor de su boca y se alimenta de las partículas de comida que llevan las corrientes. Los corales, por ejemplo, forman sus arrecifes acumulando los cadáveres calcificados de millones de pólipos que han muerto, sobre los cuales se desarrollan nuevos pólipos.
 

Coral rojo

En los fondos rocosos de las Columbretes encontramos el coral rojo **Corallium rubrum**, que no es excesivamente abundante. Este coral ha sido objeto de explotación económica desde la antigüedad y está protegido. Otro cnidario emblemático de esta zona es la gorgonia. Hay tres especies presentes: la gorgonia blanca **Eunicella singularis**, la gorgonia amarilla **Eunicella cavolinii** y, sobre todo, la magnífica gorgonia roja **Paramuricea clavata**, que forma grandes extensiones entre 32 y 77 metros de profundidad. Esta gorgonia de aspecto arborescente es emblemática del fondo marino en el Mediterráneo occidental. Tiene un valor ecológico considerable ya que proporciona biomasa y estructura a estas comunidades bentónicas (de fondo). Es de crecimiento lento y tiene una larga vida útil. Puede formar «bosques» monoespecíficos o mixtos con las otras dos especies de gorgonias.

Morena


 En cuanto a los peces bentónicos o, como se les llama popularmente, «peces de roca», tan apreciados en la gastronomía mediterránea, se encuentran presentes el cabracho Scorpaena scrofa, la doncella Coris julis, el serrano Serranus cabrilla, el castañuela Chromis chromis, el pez de San Pedro Zeus faber, el tiburón Diplurus vulgaris, la morena mediterránea Muraena helena, el corvallo negro Sciaena umbra y el indiscutible rey de este tipo de pesca: el mero Epinephelus marginatus.

Muraena Mediterráneo


 En cuanto a los peces bentónicos o, como se les llama popularmente, «peces de roca», tan apreciados en la gastronomía mediterránea, se encuentran presentes el cabracho Scorpaena scrofa, la doncella Coris julis, el serrano Serranus cabrilla, el castañuela Chromis chromis, el pez de San Pedro Zeus faber, el tiburón Diplurus vulgaris, la morena mediterránea Muraena helena, el corvallo negro Sciaena umbra y el indiscutible rey de este tipo de pesca: el mero Epinephelus marginatus.

Muraena Mediterráneo


 En cuanto a los peces bentónicos o, como se les llama popularmente, «peces de roca», tan apreciados en la gastronomía mediterránea, se encuentran presentes el cabracho Scorpaena scrofa, la doncella Coris julis, el serrano Serranus cabrilla, el castañuela Chromis chromis, el pez de San Pedro Zeus faber, el tiburón Diplurus vulgaris, la morena mediterránea Muraena helena, el corvallo negro Sciaena umbra y el indiscutible rey de este tipo de pesca: el mero Epinephelus marginatus.